Si cada año se elabora un ranking que mide el nivel de satisfacción de los empleados en todas las empresas es porque lógicamente existe una gran importancia depositada en este factor. Cada vez los trabajadores activos tienden a buscar empleos donde no solo tengan un buen sueldo, sino en los que se les proporcionen otros incentivos. ¿Quieres saber qué deberías hacer para reforzar tu propuesta y que trabajar en tu empresa sea algo que esté mejor considerado?
¿Qué hay que ofrecer?
Los profesionales valoran mucho que se les permita trabajar cómodamente. Eso significa que el entorno de la oficina resulte cómodo. La mayor parte de empleados valoran que las instalaciones de la empresa no sean únicamente un lugar donde trabajar. Se aprecia que existan zonas comunes donde interactuar con otros empleados, zonas de descanso en las que relajarse en momentos difíciles e incluso partes de las instalaciones que permitan a los distintos profesionales disfrutar de momentos de ocio. Esto es algo que Google sabe muy bien, puesto que cuenta con un amplio campus donde los trabajadores pueden visitar todo tipo de instalaciones.
En otro orden de cosas se encuentra la forma en la que se trabaja. A los profesionales de hoy día no les gusta tener que someterse a unas condiciones del pasado. Atrás han quedado los días en los que era normal entrar a trabajar a una hora y salir a otra de forma continuada día tras día. Los empleados prefieren la flexibilidad de una empresa que les proporcione horarios libres, en los que se sometan al cumplimiento de unos objetivos, pero ofreciendo libertad en cuanto a la manera de trabajar.
¿Qué más importa?
Hay muchos otros factores que juegan un papel importante. Por ejemplo, a los empleados les gusta saber que tienen acceso a teletrabajo sin dar explicaciones, que disfrutan de procesos de formación en los que les apoya su empresa y que también reciben otros beneficios y bonus, como un buen seguro médico o protección ante un buen número de posibles dificultades técnicas. También se ve con buenos ojos que se apoye la igualdad entre todas las personas que forman la empresa, tanto a nivel de sueldos como de condiciones de trabajo.
Mejorando el entorno de trabajo se pueden conseguir grandes avances y tener una plantilla mucho más satisfecha, una que sepa rendir al máximo de sus posibilidades y que siempre se encuentre satisfecha con su trabajo.