¿Conocéis la cadena de supermercados Walmart en Estados Unidos? A día de hoy tiene abiertas como 4600 tiendas distintas entre súper-centros, centros de descuento o supermercados de barrio. Pues bien, este grande de la alimentación ha incluido dentro de su plantilla a robots para que realicen las tareas de limpieza.
No os imaginéis un robot al uso, llevando cofia y plumero. Los robots empleados por Walmart son las típicas máquinas de encerado y limpieza que existen en muchos supermercados o centros de trabajo, lo que se denominan fregadoras industriales, pero que en su caso no van conducidas por una persona. Quien se encarga de dirigir convenientemente la dirección de estas fregadoras es la propia máquina a través de un conjunto de sensores y un sistema de mapeado, algo parecido a lo que hace la famosa Rumba (el robot aspirador).
Desde el punto de vista de recursos humanos podemos imaginarnos que podrá existir un ligero malestar por parte de los empleados, porque estos están siendo reemplazados progresivamente por máquinas. Ya ocurrió cuando Walmart introdujo robots escaneadores para determinadas tareas.
Sin embargo, la dirección de la empresa adelanta que todos los empleados que su trabajo haya sido sustituido por el de un robot, serán reasignados en otros departamentos. Por ejemplo, para gestionar el inventario y aquellos productos que puedan ser de difícil localización. De esta manera, la empresa se compromete con el equipo humano que tiene detrás, porque una modernización de los sistemas no tiene por qué llevar aparejada una pérdida de los puestos de trabajo.
Hace unas semanas hablamos de lo que ocurriría cuando las empresas apostasen por la inteligencia artificial, si la calidad de sus servicios se vería menoscabada o si existirían reticencias por parte de los trabajadores, sin duda Walmart es un ejemplo tangible de este proceso.