Cómo manejar el estrés en la oficina?. Hablamos de éso y más. Todos sabemos que la presión forma parte de los trabajos y sus plazos de ejecución. Se retroalimentan los unos a los otros, pero son un motor de avance dentro de la dinámica de trabajo de las empresas más competitivas. El estrés aparece cuando los trabajadores ya no son capaces de sobrellevar esa presión.

La presión no es mala, el estrés continuado, sí. Aquí van algunos consejos para reducir el estrés del trabajo, si no para ser felices en el puesto de trabajo, sí para alentar la salud. O para algo igualmente bueno, para crear grupos de trabajo verdaderamente eficaces. Veamos esos consejos:

 

– Administra tu tiempo laboral de una manera más eficaz. Perdemos mucho tiempo dedicando esfuerzo a tareas que no son importantes. Priorizar es la clave.

 

– Adopta un estilo de vida saludable. Hacer ejercicio con regularidad rompe con las tensiones que ocasiona el trabajo estresado, tanto en el nivel físico como en el mental.

 

– Conoce tus limitaciones. No llegues ni de lejos al punto de no retorno. Tu salud está en juego. Aprende a ser asertivo, aprende a decir que no a quienes te quieren cargar con más trabajo, aprende a ser asertivo contigo mismo.

 

– Autoevalúate. Mira bien, mírate bien, echa un vistazo a lo que hace el estrés contigo. Intenta verte desde fuera, sé ecuánime y corrige aquello que crees que te lleva al estrés.

 

– Evita los conflictos innecesarios. ¿Merece la pena enredarte en situaciones agotantes?. No, nunca.

 

– Acepta que algunas cosas no pueden cambiar. Si, por más que hagas y hagas por modificarlas.

 

– Vuelve con los buenos amigos. Su compañía es un bálsamo contra las tensiones. ¿No crees?.

 

– Recarga las pilas. Tómate tu tiempo. Lo necesitas y lo sabes.

 

Así se comporta el estrés contigo, ahora que sabes cómo te gobierna, ¿cómo piensas defender tu causa?. Aprende a manejar el estrés en la oficina.